Menú Principal Metereología
© Carrera de galgos (Lienzo)
El hombre, el gran depredador,
si su albedrío lo dejan
y no tiene bien sentada
en su cuerpo la cabeza.
Muchas veces he intentado
dejar las liebres para las perras
en un termino que me cedieron
por temporadas cuarenta.
Pero que difícil es poner
en los pueblos normas nuevas
más, habiendo dos galgueros
y escopetas más de treinta.
Esto que llegue de arriba
pero de abajo se estrella
entonces no pasaría
lo que contarles quisiera.
Cinco veces se me escapó
la misma liebre en la vega
la tenía ya de familia,
la llamaba, la parienta.
Siempre la levantaba
junto al camino de piedra
salía tranquila, sin miedo,
las perras en la directa.
Al llegar a las retamas
el peligro, allí empieza,
la liebre tiene su plan
las galgas están alerta.
Cinco veces escapada
la vigilancia es estrecha,
logran salir de allí,
pero temen que se vuelva.
Cosa que así ocurrió
y se perdió a la sexta,
quedando otra vez burladas
pero otra ocasión esperan.
Otro día fui a buscarla
me extrañó ya no verla
malos aires me rondaban
ese día en la cabeza.
Estaba ya preocupado
al no salir la parienta
ví a las galgas oliendo
un poco a mi derecha.
Había una cama reciente
con dos cartuchos en ella
la habían matado en la cama
la sangre así lo detecta.
¡Que mal cazador ha sido
quien ha hecho esta faena
no pensó con el corazón
solo pensó en la cazuela!
Los ojos se me nublaron
las lágrimas enseñan,
hay momentos en la vida
que estar muerto uno quisiera.
¿Dónde ésta esa liebre linda,
donde está esa liebre bella
que acostumbraba a quedar
a los galgos a dos velas?
Ese día fui llorando,
recorriendo su vereda
echando maldiciones
a estas armas tan modernas.
Al pasar por las retamas
paré buscando respuesta
pedía rezando a Dios
que esto nunca consintiera.
Liebres de Aguilar famosas
por su bravura y su fuerza,
liebres de las veinticinco
vosotras que sois las jefas,
¡qué suerte habéis tenido
que os respetan escopetas!
estáis fuera del alcance
de salvajes, de otras tierras.
Liebres que os creó Dios
escurridizas y esbeltas
que con gran facilidad
te ocultas en la maleza.
Cuántas veces he querido
resucitar liebres muertas
y volverlas a soltar
en el campo tan contentas.
Ver cómo marchan alegres
para otro día correrlas
y de poder a poder
si pueden, que se pierdan.
Autoridades que hoy estáis
luchar porque esto no suceda
y que las liebres por fin
puedan morirse de viejas.
Pienso que en algún lugar
habrá un cielo par ellas
donde galgas y rabonas
estén juntos en la fiesta.
FRANCISCO JESÚS PANIAGUA
Miércoles | +23° | +10° | |
Jueves | +26° | +12° | |
Viernes | +25° | +14° | |
Sábado | +20° | +12° | |
Domingo | +22° | +10° | |
Lunes | +24° | +10° |